El blanco nunca falla. Es un color con tantas posibilidades que es capaz de decorar por sí solo toda una vivienda, siempre está de moda y es uno de los recursos “top 10” para conseguir cualquier estilo decorativo. Por eso, podemos decir que estamos ante una baza segura. Apuesta todo al blanco y súmate a una de la tendencias de moda, el white power.
Uno de los efectos «mágicos» de este color es agrandar visualmente el espacio, así que si tienes una cocina o un baño pequeño, el blanco es tu solución. Con este tono, no sólo ampliarás la estancia de una manera muy sencilla, también conseguirás que transmita sensación de limpieza, elegancia y tranquilidad, ya que el blanco envía un mensaje de paz y tranquilidad a nuestro cerebro. ¡Un consejo! Si quieres dar un toque cálido a este «color frío», combínalo con complementos y textiles de fibras naturales. Himalaya, de acabado satinado, es una cerámica que se inspira en el blanco puro de la montaña.
Otro de las ventajas del white power es que aporta luminosidad a los ambientes, algo que es muy agradecido en cocinas y baños interiores, o con escasa iluminación natural. Para potenciar este efecto al máximo, escoge una cerámica plana con acabado en brillo, como Everest. Una buena opción para las decoraciones más desenfadadas es usar un punto de color en los elementos ornamentales. Accesorios, cuadros y textiles en tonos vivos –como rojos y amarillos– provocarán un contraste muy moderno y juvenil.
La versatilidad es otra de sus cualidades, pues se adapta a cualquier corriente decorativa. Nos permite crear desde estancias modernas y rincones zen hasta lugares sofisticados, como este baño de estilo black&white. El juego de blancos y negros es ideal para resaltar zonas concretas, como la del antepecho en la cocina o la de la ducha en baños, como vemos aquí con la malla Baqueira.
El blanco no sólo casa con todo, también puede servirnos de unión con otros colores. Si lo combinamos con grises, beige y marrones obtendremos habitaciones tranquilas, llenas de orden y armonía. Con azules claros, turquesas o verdes la decoración será muy fresca. Escoge tu color favorito con Bombay y mézclalo con espacios en blanco. Y tú ¿te apuntas al white power?