El mosaico es una herramienta fantástica para dar vida a un espacio, pues ayuda a romper la monotonía del revestimiento y resulta muy útil para enmarcar áreas que se quieren destacar o diferenciar del resto. Para convencerte de todas sus ventajas, hoy te contamos las últimas tendencias en mosaicos y te ofrecemos las claves para integrarlos con éxito en el baño o en la cocina de casa.
Ideas para colocar mosaicos
Cuando de mosaicos se trata, en la mesura está el secreto del éxito. Revestir por completo una habitación de estas pequeñas teselas recargaría demasiado el ambiente y, para qué engañarnos, en la actualidad los interiorismos viran más hacia el minimalismo y la sobriedad que hacia el barroco. Así que mejor incorporar el mosaico con sentido común.
Aprovéchalo para separar ambientes, por ejemplo, en una combinación de salón y cocina de concepto abierto. La imagen inferior ilustra muy bien un uso inteligente del mosaico: se ha elegido para el murete que separa el pasillo de acceso al salón y la isla de la cocina, definiendo perfectamente dónde comienza la zona de cocinado. Por cierto, la malla –a conjunto con el revestimiento y el pavimento de toda la estancia- forma parte de la colección Chicago, de Gala.
¿Pero y si lo utilizas para destacar una zona o un elemento concreto? Apúntate esta idea para la cocina:
Con el mosaico se ha dado protagonismo al frente de la campara extractora, enmarcándolo y dando un toque de frescura a la zona de cocinado, revestido con el modelo Sidney en beige como el resto de la cocina. Fíjate que, además, la idea del mosaico se replica también junto a la mesa, iluminando la zona de comedor. En definitiva, una solución muy atractiva y sencilla para una cocina de carácter joven.
Pero también el baño se aprovecha de este recurso. Toma nota de la fotografía inferior, donde el mosaico Moscú Gris-Marengo se emplea para diferenciar la zona de la ducha en una combinación bicolor que aporta dinamismo al ambiente y complementa muy bien el resto del revestimiento, con el porcelánico Moscú gris.
Últimas tendencias: ten en cuenta lo que se lleva
El mosaico está de moda y, por eso, las alternativas para incorporar una malla a tu baño o cocina son cada vez mayores. Si no sabes por qué tipo de mosaico decidirte, toma nota de lo que se lleva.
Para empezar, apuesta por tonos neutros: gris, visón, beige, antracita. Los colores vivos, que se llevaban mucho hace algunos años, han perdido fuerza frente a una decoración que cada vez vira más hacia la sobriedad. Además, el colorido, a la larga, puede acabar cansando, mientras que los tonos neutros –en plena tendencia ahora mismo- son atemporales.
En cuanto a los motivos del mosaico, tradicionalmente se ha apostado por cuadrículas muy pequeñas, pero hoy en día las teselas “han crecido” y se llevan combinaciones más grandes. Fíjate, por ejemplo, en la cuadrícula del Mosaico Niebla (imagen inferior), que forma parte de la serie Winter de Gala. Destaca no solo por su tamaño, más grande de lo habitual, sino por su acabado acuarelado: una propuesta muy moderna que, como ves, ayuda a dulcificar un mobiliario de formas rotundas como los sanitarios de la colección Eos.
Una tendencia en boga es, no obstante, optar por otras formas diferentes, como las teselas rectangulares o el mosaico hexagonal. Echa un vistazo a las dos propuestas de Gala que te presentamos.
Por un lado, el mosaico Baltik, cuyo diseño alargado ofrece un aspecto muy moderno. Además, las diferentes piezas que conforman el mosaico varían entre el liso y la textura jugando con diferentes tonalidades para ofrecer un acabado mate muy atractivo.
Por otro lado, sabemos que te enamorarás de la malla Hexágono de la serie Laponia, que puedes ver en el frente de encimera de esta cocina:
El mosaico reviste por completo la pared en forma de colmena con un resultado muy atractivo que, no obstante, no roba el protagonismo al resto de elementos de la cocina, gracias a la discreta combinación de tonos y texturas de esta malla beige –cuyo acabado está inspirado en el barro cocido.
Finalmente, la textura del mosaico te dará también algunas pistas sobre el modelo a elegir, en función del estilo que más te guste. Por ejemplo, una cocina con look clásico agradecerá la introducción de un mosaico con pequeñas teselas en brillo, como el de la colección Malmo de Gala, que ves en la fotografía inferior.
Por su parte, una casa de estilo rústico encontrará en la magnífica combinación de colores cálidos de la malla Laponia Barro un recurso perfecto para dar un toque de distinción a cualquier espacio.
¿Acaso no te encanta la composición de este baño? El mosaico refuerza en la zona de la ducha el colorido del pavimento (Laponia barro, de Gala) y enmarca la zona de la ducha convirtiéndola en la reina del baño. Por cierto, fíjate en el detalle de la línea que separa el revestimiento cerámico y la pared pintada: se ha hecho con las pequeñas teselas del mosaico ¡y queda genial!
Finalmente, una textura natural es siempre una garantía de éxito. En este sentido, opta por revestimientos con acabados que imiten a la piedra o a la madera, como es el caso de la cerámica Aitana, de Gala, y su mosaico. De textura rugosa y un acertado acabado en tonos grises, este modelo es perfecto para crear cenefas, tal y como ves en esta imagen: